Doscientos kilómetros de costa que van desde el Cap Falcó, frontera con Francia, hasta el rio Tordera en Blanes que delimita con el Meresme. La mejor manera de disfrutar de los secretos de la Costa Brava es embarcándose en velero catamarán o yate a motor con o sin tripulación. Es un lugar ideal para navegar, millas y millas de costa con maravillosas calas, acantilados y playas de arena fina donde la montaña y el mar abrazan pequeños pueblos marineros. Fondeos de ensueño y buenas instalaciones náuticas.
Reservas marinas como la de las Medas donde sumergirse en el azul de sus aguas y una gastronomía de lujo. Puntos de visita obligada son: el Parque Natural de el Cap de Creus; en esta península situada en el extremo norte da la Costa Brava de perfil singular erosionado por la tramontana y las olas que a su vez alberga una de los lugares mas emblemáticos de toda la costa: Cadaqués donde podemos visitar la antigua casa-taller del “fenómeno” y onírico Salvador Dalí llegando con el auxiliar desde el barco amarrado en una boya de Port Lligat
Queridos Joaquín y Aldahara.
El viaje de verdad ha sido para las 10 que hemos ido, el mejor viaje de nuestra vida. Nos lo hemos pasado increible, hemos disfrutado de cada cosa. El barco era maravilloso, sencillamente excepcional, recomendable 200%...